jueves, 30 de octubre de 2008

Simoncito Comunitario "Cañaveral"


Desde el mes de Enero del presente año se continuo desarrollando en la comunidad del “Caserío Cañaveral”, la vía de Atención Educativa No Convencional, cuyo propósito es brindar atención de manera integral a la población infantil (maternal) de 0 a 3 años de edad, sin descartar aquellos niños y niñas entre 3 a 6 años que de una u otra manera no han tenido acceso al sistema educativo por la vía convencional, ofreciendo orientaciones para un mejor cuidado de acuerdo al desarrollo, características y necesidades de cada niño y niña de la comunidad, estimulando sus áreas de desarrollo y aprendizajes, mediante experiencias significativas dentro del ambiente del hogar y la comunidad, tomado en cuenta que poseen la capacidad de simbolizar o representar mentalmente acciones, personas, además curiosean, indagan, preguntan, se equivocan, inventan y disfrutan.
Manifestando que la presente la vía de Atención cuenta con una matrícula de 49 familias en la comunidad del Caserío Cañaveral y en la comunidad de Torbellan son atendidas solamente 9 familias, con ello da un total en general de 67 niños(as): 36 niñas y 31 niños con edades comprendidas de 2 meses a 46 meses. También es importante resaltar que en la localidad de cañaveral existe un Multihogar “Ositos Cariñosos” A.C Rayito de Luz SENIFA, donde se mantiene una matrícula de 23 niños(as) entre ellos tenemos: 10 niñas y 13 niños, con edades comprendidas de 12 meses a 43 meses.
En cuanto a las madres embarazadas solamente se atiendo a 5 embarazadas ofreciéndoles una gama de ejercicios y estimulaciones para las primeras edades en gestación.
Por otra parte es relevante destacar que el 70% de la matricula del Multihogar habitan en zonas aledaños a la comunidad.
Al inicio la Atención Educativa No Convencional del “Caserío Cañaveral”, desarrollaba como estrategia pedagógica las visitas casa por casa, con bolsos que contenían materiales lúdicos, entablando con familiares y personas significativas conversaciones espontáneas sobre el desarrollo del niño y niña, en donde intercambian experiencias que facilitaban semanalmente las orientaciones y estimulaciones referente a las Áreas del desarrollo infantil; Àrea Cognitiva, Àrea Lenguaje, Àrea Socio-Afectiva, Sexual entre otras.

A partir del mes de Marzo se implemento en la comunidad el Simoncito Comunitario “Cañaveral”, proyecto a desarrollar por la mencionada vía de atención Educativa, con el objetivo de incentivar la formación integral del niño y la niña, en cuento a hábitos, habilidades, destrezas, actitudes y valores, basados en la identidad local, regional y nacional, mediante la labor del adulto significativo.

ACTIVIDADES DESARROLLADAS

§ Visitas a los niños, niñas, familias y multihogar de la comunidad a partir del 11-02-08.
§ Donación de juguetes al multihogar “Ositos Cariñosos” ubicados dentro de la comunidad.
§ Se tramitó y se consiguió en el Instituto Autónomo de la Salud, la fumigación de un sector de la comunidad cumpliendo con una actividad sobre la prevención del Dengue. Fecha 21-02-08.
§ Se gestionó y se obtuvo del programa “Mi primera Ropita” auspiciado por la Fundación del Niño del Estado Yaracuy, la donación de 3 canastillas para unas madres embarazadas del caserío Cañaveral.
§ Incremento de la matrícula de Preescolar y 1er Grado, durante el 2do lapso del periodo escolar 2007-2008.
§ Taller de formación Docentes: currículo y planificación desde el 25 al 29-02-08.
§ Jornada de salud auspiciada por la Fundación del Niño del Estado Yaracuy, desde 28-02-08 al 05-03-08.
§ Abordaje a la comunidad de Torbellan, atendiendo de manera integral a 9 familias.
§ Taller de inducción y formación del Simoncito Comunitario desde 31-03-08 al 04-04-08.
§ Implementación del Simoncito Comunitario “Cañaveral” a partir del 07-04-08

1er paso Sensibilización y Diagnóstico
v Cartelera informativa.
v Taller sobre la temática dirigido los directivos, docentes, obreros y administrativo de la institución.
v Reunión con el consejo comunal, dando a conocer el proyecto del Simoncito Comunitario “Cañaveral”.
v Reunión con los Padres y Representantes del Subsistema Inicial, sensibilizando sobre el Simoncito Comunitario “Cañaveral”.
v Reunión con el comité Madres del Barrio sensibilizando sobre el mencionado proyecto.
v Distribución de trípticos, folletos y periódico infantil alusivo al Simoncito Comunitario, en los hogares de la comunidad del Caserío Cañaveral
v Esquina caliente (entrega de trípticos, folletos, exhibición de pancarta y grafitazo) dándole la bienvenida al Simoncito Comunitario “Cañaveral”.
v Elaboración de mural referente a la temática, con la colaboración de habitantes del sector.
v Censo comunitario, extrayendo las características más relevantes del sector.
v Taller dirigido a las madres atendidas por la vía de Atención No Convencional.

§ Donación de calzados a los niños y niñas de la zona invadida del Caserío Cañaveral. Fecha: 09-04-08.
§ Taller familia y solidaridad. Fecha 16-04-08.
§ Taller de Ajedrez auspiciado por la Alcaldía del Municipio Peña, ejecutado en la Institución. Fecha 20-05-08.
§ Reunión de las Doc. AENC del Municipio Peña referente al Simoncito Comunitario. Fecha 21-05-08.
§ Taller de Ajedrez, I Etapa programa dirigido a las Docentes del Subsistema Inicial auspiciado por la Alcaldía del municipio Peña. Fecha 29-05-08.
§ Grafitazo actividad alusiva del día de no fumar, realizada en la calle principal de la comunidad, junto a la participación activa de los alumnos y alumnas de 4to y 6to grado de la institución.
§ Taller Municipal referente a la implementación del Simoncito Comunitario desde el 09-06- hasta 13-06-08.
§ Taller de Ajedrez II etapa programa dirigido a las Docentes del Subsistema Inicial auspiciado por la Alcaldía del municipio Peña. Fecha 19-06-08.
§ Donación de 5 cestas de alimentos, elaborado con artículos recolectados en algunos hogares de la comunidad. Fecha 30-06-08.
§ Donaron de ropa y calzados a niños y niñas del sector de la zona invadida del 03 al 05-07-08.

Mis amigas

sábado, 25 de octubre de 2008

simoncito comunitario


VICEMINISTERIO DE PROGRAMAS Y PROYECTOS EDUCATIVOS
DIRECCIÓN GENERAL DE EDUCACIÒN INICIAL





ATENCIÓN EDUCATIVA NO CONVENCIONAL



FEBRERO 2008
MATERIAL SUJETO A REVISIÓN

ADÁN CHÁVEZ
Ministro del Poder Popular para la Educación
IRIS M. SÀNCHEZ M. DE TORRES
Viceministra de Programas y Proyectos Educativos
EDWIN DÍAZ
Director de la Oficina Estratégica de Seguimiento y
Evaluación de Políticas Públicas
BALTAZAR BETANCOURT
Director General de Supervisión y Formación del Personal Docente
ELDA M. CONTRERAS
Direcciòn General de Educaciòn Inicial (E)
ONEYDA GARCÍA
Responsable del Convenio Cuba – Venezuela/DGEI
Equipo Técnico Direcciòn General de Educaciòn Inicial:
Carlos Toro M, Olga Sánchez, Oneyda García, Irma Alvarado de Ojeda, Zulay Zerpa, Celeste Beitía, Héctor Llovera.
Institución Asesora: Centro de Referencia Latinoamericano para la Educación Preescolar CELEP.- (Convenio Integral de Cooperación Cuba – Venezuela)






EDUCACIÓN INICIAL.
Vía de Atención Educativa No Convencional Simoncito Comunitario

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999) demanda del Estado la implementación de Políticas educativas dirigidas a garantizar el derecho humano a la educación, a partir de una relación democrática, participativa y protagónica, entre los ciudadanos y las ciudadanas con la finalidad de promover el ejercicio de la ciudadanía, en una relación de interdependencia, coordinación, cooperación, solidaridad y corresponsabilidad, principios sobre los cuales se promueve e impulsa la revolución bolivariana y socialista.

Las Políticas educativas desarrolladas por el Ministerio del Poder Popular para la Educación están dirigidas a la ejecución de acciones educativas contextualizadas, coherente con los principios y fines de la Educación Bolivariana y dirigidos a la inclusión social, brindar una educación integral de calidad para todos y todas, así como a potenciar y fortalecer la participación consciente de la familia y otros actores en el hecho educativo.

La Educación Inicial, primer subsistema del Sistema Educativo Bolivariano, en sus Niveles de Educación: Maternal y Preescolar, brinda atención integral desde la gestación a los niños y las niñas hasta los seis (6) años de edad, no sólo con el propósito, de garantizar el derecho humano a la educación, sino también, de potenciar al máximo su proceso de aprendizaje y desarrollo armónico e integral. Atención que se concreta a través de la Atención Educativa Convencional y Atención Educativa No Convencional.

Atención Educativa No convencional. Referida a la atención integral de los niños y niñas entre 0 y 6 años, mediante el desarrollo y ejecución de estrategias de formación, orientación, modelaje y organización, dirigidas a la familia y la comunidad en general, a los fines de privilegiar a la familia como primera institución educativa del niño/a en sus competencias para abordar el proceso de aprendizaje y desarrollo de sus hijos menores. Asimismo, la atención educativa de los niño/as de cada comunidad que no son atendidos/as por los centros convencionales, ya sea porque no cuentan con espacio, o que las familias habitan en lugares distantes a los centros educativos existentes.

La Atención Educativa no Convencional como vía de atención, se concreta a través del Simoncito Comunitario, que enfatiza el acercamiento del docente al niño/a donde quiera que él/ella se encuentre, reconociendo las condiciones de participación, formación, organización y corresponsabilidad de la familia y la comunidad en el proceso de aprendizaje y desarrollo de los niños y niñas, utilizando los espacios naturales de la familia, la comunidad y promoviendo permanentemente la participación, organización de la familia y la comunidad para la atención integral de la población infantil.

El Simoncito Comunitario, basado en los objetivos, principios y fundamentos teóricos del currículo de Educación Inicial, se constituye sobre la plataforma de una relación sistémica entre la familia, la comunidad, un enfoque interinstitucional e intersectorial y el docente, elementos esenciales de la Atención Educativa No Convencional.

El Simoncito Comunitario promueve y se apoya en dos componentes, fundamentalmente políticos, vitales para la profundización de la construcción de la sociedad socialista, uno el Tercer Motor, por cuanto hace de la comunidad una escuela, integrada por diversos espacios para la educación y la formación en valores, y dos, la concreción de la explosión del poder popular, a través de la conformación de los Consejos de Atención Integral a la Primera Infancia (CAIPI), estructura comunitaria de participación del pueblo en el proceso educativo o a través de los Consejos comunales.

El Simoncito Comunitario, en su concepción responde al interés superior de la primera infancia y se fundamenta en los mismos componentes del proceso educativo y las necesarias interrelaciones que entre estos se dan, es decir, contenido, método y procedimientos, medios y recursos didácticos, seguimiento y evaluación, elementos que contribuyen a mejorar la calidad de la atención integral que se brinda.
Desde esta perspectiva, la atención educativa no convencional en Educacion Inicial presenta como características básicas:
ü Privilegia a la familia como primera institución educativa de sus hijas e hijos, entre 0 y 6 años de edad.
ü Se instrumenta en el marco filosófico, político, legal, fundamentos y principios teóricos acerca del aprendizaje y el desarrollo que sustentan el currículo de Educación Inicial.
ü Considera y respeta el contexto, social, cultura e histórico, las normas, costumbres y patrones de crianza que inciden positivamente en el proceso de aprendizaje y desarrollo de la población infantil menor de 6 años de edad.
ü Fortalece la acción comunitaria, al contribuir sistemáticamente en el proceso de atención educativa no convencional que se desarrolla, desde los Centros de Educación Inicial, en el entorno geográfico y social.
ü Se apoya en la participación consciente, comprometida y responsable de diferentes instituciones, sectores, organizaciones y actores educativos relacionados con la atención integral a la familia y la niñez, propiciando su organización para trabajar mancomunadamente en el marco de un enfoque interinstitucional e intersectorial.
El Simoncito Comunitario, como vía de atención integral en la Educación Inicial, se plantea como objetivos fundamentales:
· Potenciar a la familia como primera institución educativa, para que participe conscientemente en el proceso de aprendizaje y desarrollo de sus hijas e hijos.
· Organizar y articular la acción y gestión sistemática de los actores comunitarios, desde un enfoque interinstitucional e intersectorial, para la conformación y formación de una estructura comunitaria dirigida a la atención integral a la primera infancia.
· Incluir a la comunidad como contexto referencial para el desarrollo social, cultural e histórico para el proceso educativo y de socialización de las niñas y los niños menores de 6 años de edad.
La participación corresponsable de diferentes instituciones, sectores, organizaciones, actores educativos y la familia se concreta mediante la actividad de Atención Pedagógica Conjunta (APC) que se ejecuta a través de:
§ Atención y orientación a las embarazadas, en aspectos teóricos y prácticos; salud, nutrición, psicológicos, desarrollo y cuidados del recién nacido.
§ Atención individual en el hogar a niños y niñas de 0 a 1 año de edad, cuando existan situaciones especiales que no permitan la movilización de la familia a los espacios comunitarios., o cuando el niño o la niña necesite de atención educativa especializada.
§ Atención grupal en ambientes familiares, espacios comunitarios, lúdotecas, hogares de atención integral a partir de procesos permanentes y sistemáticos de formación y orientaciones a los diversos actores educativos que rodean al niño y la niña (Docentes, Familia, Voluntarios, Madres Integrales).
Los Centros de Educación Inicial y las comunidades, con un personal docente de Educación Inicial suficientemente preparado con un alto nivel de compromiso social, se convierten en centros de formación permanente para otros responsables y demás actores educativos de la atención a niños y niñas entre 0 y 6 años de edad.

La Atención Educativa no Convencional Simoncito Comunitario se ofrece a través de:

· La asignación de personal docente en los centros de Educación, a los fines de atender a las familias y los/as niños/as que no lograron ingresar al centro por falta de cupo o espacio físico, los cuales deben ser incorporados como matrícula de la institución educativa a la cual está adscrito el/la docente, la atención se brindará en espacios diversos que incluyen ambientes comunitarios, familiares, centros comunitarios de atención integral y hogares espontáneos de cuidado infantil,
· Ludotecas escolares y comunitarias.
Constituyen espacios comunitarios para la atención de niños y niñas entre 0 y 3 años del nivel maternal y niños/as entre 4 y 6 años del nivel preescolar que no asisten a los centros escolares, y un lugar de encuentro para adultos, niños y niñas, en el que el juego facilita experiencias que contribuyen con el desarrollo integral de la infancia.

· Materiales audiovisuales e impresos.
Producción y distribución de materiales audio-visuales e impresos sobre contenidos de la Educación Inicial para su promoción y divulgación en la familia y la comunidad a través de los medios impresos, radiales y televisivos de comunicación.
Desarrollo de programas de formación de padres, madres embarazadas.
Organización y formación de los consejos comunales en relación a los aspectos referidos a la atención y protección integral a la infancia.

La Atención Educativa No Convencional, mediante la metodología de trabajo del Simoncito Comunitario, se implementa en los ambientes de familia y comunidad. Significa el conocimiento (caracterización) de la realidad, social, cultural, geográfica e histórica del contexto comunitario como punto de partida para diseñar y ejecutar acciones contextualizadas, dirigidas a viabilizar la participación de la familia en el proceso educativo de sus hijos e hijas entre 0 y 6 años de edad, en las condiciones del hogar y el entorno comunitario, acción que conlleva la aplicación de técnicas y métodos de gestión comunitaria para el diagnóstico participativo de las necesidades, fortalezas, debilidades, recursos y potencialidades.

El Simoncito Comunitario sistematiza, en su metodología de trabajo, las diversas experiencias exitosas de los Programas No Convencionales: Programa Familia, Centros del Niño y la Familia (CNF), Proyecto de Atención Preescolar al Niño del Sector Rural, Proyecto El Maestro en Casa (PEMEC), Hogares de Cuidado Diario y Multihogares. Así mismo, contextualiza, en términos de nuestra realidad, los resultados más significativos del proceso de colaboración e intercambio de saberes, conocimientos y experiencias significativas derivadas del Convenio Integral de Cooperación Cuba – Venezuela.

COMPONENTES FUNDAMENTALES DEL SIMONCITO COMUNITARIO

La Familia.

La familia, célula fundamental de toda sociedad humana, tiene entre uno de sus deberes desarrollar acciones educativas en el hogar con sus hijos e hijas para promover su aprendizaje y desarrollo.

La C.R.B.V. establece en su Artículo 75, “El Estado protegerá a las familias como asociación natural de la Sociedad y el espacio fundamental para el desarrollo integral de las personas...”. “ Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a vivir, ser criados y criadas y a desarrollarse en el seno de su familia de origen”. El Artículo 76, además, atribuye a la familia funciones, obligaciones y deberes compartidos e irrenunciables, como son: el de criar, formar, educar, mantener y asistir a sus hijos e hijas.

La Ley Orgánica Para la Protección del Niño y el Adolescente en su Art. 5 establece: “La familia es responsable de forma prioritaria, inmediata e indeclinable, de asegurar a los niños, niñas y adolescentes el ejercicio y disfrute pleno y efectivo de sus derechos y garantías. El padre y la madre tienen responsabilidades y obligaciones comunes e iguales en lo que respecta al cuidado, desarrollo y educación integral de sus hijos…”

Dentro de este marco Constitucional y legal, la Educación Inicial parte de la valoración de los conocimientos y experiencias, que poseen las familias, referidos al desarrollo de sus hijos e hijas en las primeras edades, tomando en cuenta, las características socioculturales e históricas; así como, el contexto geográfico y comunitario, respetando sus valores, creencias, costumbres, conocimientos y aquellas prácticas y patrones de crianza y educación positivos.

El Currículo de la Educación Inicial, concibe por familia al grupo primario que atiende y acompaña al niño y la niña en su hogar, y que satisface sus necesidades de alimentación, salud, afecto, juego, comunicación, seguridad y conocimiento; y es en el seno de ésta donde se modelan -desde los momentos iniciales- los valores fundamentales del ser humano, social, intelectual y moral de su descendencia, hecho que se produce sobre una sólida base afectiva y emocional.

Es a través de los vínculos que se establecen en las relaciones interpersonales entre adultos, niñas y niños, que se inicia la formación de las futuras generaciones. En el seno de la familia, los niños y las niñas adquieren y valorizan el sentimiento de pertenencia a un grupo cercano, en particular, identifican: “mi madre”, “mi padre”, “mis hermanos”, “mis tíos”, “mis abuelos”, en general, “mi familia”. En este núcleo humano, se promueven y favorecen todas aquellas interrelaciones fundamentadas en la igualdad de derechos y deberes, el respeto, la solidaridad y la cooperación, entre otras.

La atención integral no convencional, constituye un proceso continuo de transformación y desarrollo sistemático, durante el cual se implementan estrategias de abordaje que reconoce al núcleo familiar como la primera y permanente institución educativa y de socialización, fundamentada en la experiencia y saberes de la familia y de otros actores educativos de la comunidad.

El énfasis formativo, por tanto, se hace mediante la sensibilización y orientación a la familia, desde el período de la gestación, con el propósito de contribuir a su más efectiva y consciente participación en el proceso educativo de sus hijos e hijas en edad temprana. Se trata, de lograr que la familia adquiriera y desarrolle conocimientos, a partir de sus propios saberes y experiencias, a desarrollar determinadas habilidades y competencias que le permitan ejercer adecuadamente la conducción del aprendizaje y el desarrollo de sus niños y niñas, en las condiciones del hogar, lo que en el futuro enriquece extraordinariamente cualquier acción educativa.


La Comunidad.

La atención oportuna e integral a la población infantil, desde la gestación y después del nacimiento, considera además de las leyes de la evolución biológica, las leyes del desarrollo histórico y social, que contempla la fundamental importancia que en la formación del individuo tiene la familia –la madre, el padre, el hermano y los otros miembros del grupo familiar- los pares sociales de interacción, intercambio y colaboración, el docente, otros actores educativos, así como, el grupo social del entorno comunitario donde crecemos, nos desarrollamos y aprendemos, es decir, la comunidad.

Desarrollar una acción formativa y organizativa en el ámbito de la comunidad, requiere de la valoración de las interrelaciones sociales, culturales e históricas de la población que la habita. También, significa conocer, reconocer y valorar la disposición, fortalezas y potencialidades de sus organizaciones y lideres, para avocarse a la atención de las múltiples actividades y tareas que les ocupan, así como de su compromiso para incorporarse al proceso de la atención integral a la niñez.

Las familias que viven en las comunidades, no están aisladas. Pueden vivir distantes unas de otras, pero siempre hay un entorno geográfico que las une, que les es común, el cual se identifica por sus características físicas, demográficas, por los sucesos que constituyen su origen, por su lengua, entre los aspectos más relevantes. La comunidad, es el entorno inmediato social, cultural e histórico, donde tiene lugar el desarrollo de las personas que la habitan, que se perciben como parte de un contexto y grupo humano, lo que determina el sentido de pertenencia e identidad.
En cada comunidad, hay líderes u otros actores que detectados, reconocidos, sensibilizados y formados, se convierten en promotores sociales y educativos de las familias y de sus hijos e hijas. La comunidad, por tanto, es el espacio natural para la realización de acciones educativas favorecedoras del aprendizaje y del desarrollo infantil.

En éste sentido, la implementación del Simoncito Comunitario, da inicio a un proceso sistemático e intensivo de promoción, divulgación y sensibilización, dirigido a todos los actores comunitarios, con la finalidad de que se empoderen progresivamente del proceso y trasciendan de la visión existencialista y focalista en la atención y solución de los problemas a un enfoque de ínter institucionalidad e intersectorialidad donde la interdependencia, cooperación, solidaridad y corresponsabilidad, son principios que orientan sus acciones comunitarias.


El Enfoque Interinstitucional e Intersectorial.-

El enfoque interinstitucional e intersectorial se concreta en el ejercicio cotidiano de los principios de Corresponsabilidad, Interdependencia, Coordinación, Cooperación, Concurrencia y Solidaridad determinados en los Artículos, 4 y 184, Numeral 1, de la C.R.B.V., establecen los criterios, estrategias y mecanismos interinstitucionales e intersectoriales orientados a favorecer de manera efectiva y eficiente la integración y vinculación de: programas, proyectos, planes y la racional administración de los recursos, humanos materiales y financieros, de los diferentes entes y organizaciones publicas o privadas. Desde éste punto de vista, el enfoque interinstitucional e intersectorial, común a las dos vías de atención, Convencional y No Convencional, constituye una forma concreta de promover e implementar la atención integral a la población infantil entre 0 y 6 años de edad,

La atención integral, se concibe en el marco del establecimiento de políticas, lineamientos y mecanismos de articulación entre diferentes instituciones, sectores, organismos gubernamentales y no gubernamentales, asociaciones tanto públicas como privadas, nacionales, regionales, municipales o locales a fin de viabilizar el acceso de la población infantil, desde su gestación hasta los 6 años de edad, a los servicios de educación, salud, cultura, recreación y deportes, alimentación, protección de sus derechos y demás programas sociales y en cuya concreción la familia tiene un papel protagónico fundamental.

El enfoque interinstitucional e intersectorial, implica que educadores, familias, representantes y otros actores educativos (médicos, abogados, psicólogos, sociólogos, odontólogos, artesanos, cultores, artistas, deportistas, promotores sociales, estudiantes) en correspondencia con las actividades que realizan y en función del interés y bien común, se agrupan y asumen responsablemente la misión de brindar atención a la infancia para favorecer su bienestar, su aprendizaje e integral desarrollo.

El Docente.-

El perfil del docente de Educación Inicial, tanto en lo profesional como lo personal y social-cultural, comprende características particulares, es decir, que tenga amplio conocimiento y dominio sobre desarrollo integral del niño y la niña entre los 0 y 6 años de vida; de cómo aprende, de sus intereses, potencialidades y de la realidad social y cultural, así como de una profunda sensibilidad social, en virtud de las condiciones presentes en los ambientes de trabajo donde le corresponde interactuar.

El o la docente de Educación Inicial, maneja principios andragógicos, que le permiten mediar en la formación y desarrollo de las familias y de otros actores educativos, con la finalidad de que éstos asuman conscientemente la ejecución de acciones educativas para fortalecer el proceso de aprendizaje y desarrollo de los niños y las niñas.

En este sentido debe poseer:

· Habilidad para la negociación y promoción del trabajo en equipos interdisciplinarios, con la finalidad de concretar acciones interinstitucionales e intersectoriales concurrentes y contextualizadas de acuerdo a la realidad social de la comunidad.

· Habilidad en el diseño y elaboración de Planes de trabajo que posibiliten a los líderes y organizaciones comunitarias para el logro de objetivos comunes dirigidos a la atención integral de la población infantil, así como el uso racional de los recursos, tanto humanos como materiales existentes en la comunidad.

· Habilidades y destrezas para realizar seguimiento, acompañamiento y evaluación con respecto a:

i) Proceso de aprendizaje y desarrollo de los niños y las niñas;
ii) Calidad de la formación de la familia y su participación en el hecho educativo de sus hijos e hijas;
iii) Niveles de compromiso y participación de la comunidad, en las acciones educativas dirigidas a la atención integral de la primera infancia.

Para el desarrollo de su trabajo pedagógico con las familias, el docente asume bajo su responsabilidad un grupo de ____ familias (Dependiendo del contexto), esto con la finalidad de darle a éstas una atención y formación de calidad de acuerdo a las características y necesidades del grupo en cuestión y en consideración del espacio físico que ocupan y que le permitan entre otros aspectos, el planteamiento de nuevas estrategias didácticas, el uso de nuevos materiales así como la innovación desde el punto de vista de la planificación y organización de la de Atención Pedagógica Conjunta y de la formación del Voluntariado Simoncito.

Desde este punto de vista, los/as maestros/as de Educación Inicial, en su interrelación con las organizaciones comunales, las familias y otros actores sociales, contribuyen a impulsar un proceso social inherente al principio de corresponsabilidad entre el Estado, la Familia y la Sociedad.

La Acción Educativa del/a Maestro/a de Atención Educativa No Convencional. Simoncito Comunitario.

La acción educativa desarrollada por el/la maestro/a de educación inicial que se desempeña en espacios de familia y comunidad, no es diferente a la que se desarrolla en la atención convencional, no implica una nueva práctica pedagógica, lo que cambia es el ambiente y las condiciones en que se desarrolla el proceso de aprendizaje y al énfasis del trabajo andragógico del docente con la familia y la comunidad.

Esta acción se orienta al desarrollo humano de los miembros del núcleo familiar de los niños y niñas de 0 a 6 años (maternal y preescolar) no atendidos por la vía convencional, a los fines de favorecer su rol y participación como primeros formadores de sus hijos y como primer escenario del proceso de socialización. El/la maestro/a de educación inicial ejerce su acción educativa a través de los padres, adultos significantes y miembros de la comunidad en la cual se adscribe.

Se parte de la valoración de los conocimientos y experiencias que posee la familia en relación al proceso de aprendizaje y desarrollo de sus hijos/as, adaptándose a las características socio-culturales, el contexto geográfico de las familias y la comunidad, respetando sus valores, creencias y costumbres y aquellas practicas positivas que tienen las familias en la crianza y educación de sus hijos/as.

La Atención educativa No Convencional Simoncito Comunitario en estos escenarios, no implica solo la difusión de información, sino transferencia de saberes que permitan al adulto, fortalecer sus capacidades como primeros formadores de sus hijos/as e identificar y aprovechar las oportunidades del ambiente físico, social, del hogar y de su comunidad.

La acción educativa en la atención no convencional constituye una vía de atención abierta, flexible y participativa que dinamiza y articula la gestión de otros sectores, instituciones y servicio de atención a niños y niñas de 0 a 6 años, que garanticen sus derechos humanos y sociales y la integridad en la atención que requiere dicha población.

Metodología de trabajo del Simoncito Comunitario.-

La metodología implica una relación sistémica entre sus elementos y se lleva a cabo con la participación democrática y protagónica de la familia, la comunidad, docentes y otros actores educativos, en los ambientes de familia y comunidad. Su desarrollo requiere la ejecución de un conjunto de acciones dirigidas a posibilitar esta vía de atención.

Primera Fase

El Simoncito Comunitario requiere de una estrategia de divulgación y sensibilización que asegure no solo captar el interés hacia este tipo de atención, por los diferentes actores educativos involucrados, sino fundamentalmente para garantizar el conocimiento de sus propósitos, formas de organización y de participación de las familias, de sus niños y niñas, así como de las diferentes instituciones, sectores y la comunidad. Las estrategias promoción, sensibilización y formación se realizan en las diferentes instancias de manera permanente y sistemática, aprovechando todas las formas y medios de comunicación, existentes y disponibles.

La Sensibilización, constituye el momento inicial y se prolonga durante todo el proceso de ejecución del Simoncito Comunitario, es, por tanto, un procedimiento sistemático y permanente, dirigido a la movilización y concientización de los actores (familias, organizaciones comunales y otros) que participarán en el desarrollo de las estrategias educativas, lo que requiere dominio de los fundamentos teóricos y metodológicos que sustentan esta vía de atención.

La sensibilización, a través de la divulgación, materiales impresos, audiovisuales, además de promover la toma de conciencia sobre la importancia de brindar atención integral y oportuna a la niñez, debe concebir los temas a promover en correspondencia con las fases de ejecución del Simoncito Comunitario, las formas a utilizar (directas, casa por casa, mediante carteles, programas o mensajes radiales, televisivos, videos u otro tipo de tecnología audiovisual).

El proceso de sensibilización, debe conducir a:

v La conformación del Consejo de Atención Integral a la Primera Infancia (CAIPI) y su inclusión en los Consejos Comunales, parte del conocimiento que se tiene sobre las competencias de cada institución, sector, organización y del servicio que brindan. Y que se integrarán para abordar acciones contextualizadas dirigidas a viabilizar una atención integral de calidad, así como para fortalecer las capacidades de la familia y de los otros actores educativos que se relacionan con la atención integral de los niños/as de 0 a 6 años de edad.

v La captación de las posibles Voluntarias(os) Simoncito, y otros actores educativos, que participarán en el desarrollo de esta vía de Atención.

Diagnostico participativo. El Simoncito Comunitario, implica, para su desarrollo, el conocimiento del escenario comunal en que tendrá lugar, por lo que resulta primordial desarrollar un proceso de indagación comunitaria que permita caracterizar la realidad social y cultural en la cual la acción educativa se hará. Requiere la participación activa de docentes, adscritos al Centro de Educación Inicial local, miembros del CAIPI, actores de la comunidad, Consejos Comunales, estudiantes pasantes, lo que permite tener una visión y comprensión de la realidad social en la cual les corresponderá, a todos y todas, interactuar durante la ejecución y desarrollo de la AENC.

Para obtener la información requerida, se aplican diferentes técnicas y procedimientos tales como: la entrevista, encuestas, la observación sistemática y el estudio documental. Para tener conocimiento, sobre el número de niños y de niñas entre 0 y 6 años de edad, donde están, quién los atiende, el contexto comunitario en el que crecen, se desarrollan y educan los niños y las niñas en estas edades, así como, las fortalezas o amenazas que pueden conllevar o no al logro de los propósitos y finalidades de la Educación Inicial.

El Diagnóstico comprende los siguientes aspectos:

· Caracterización de la familia. Lo que implica a todas y cada una de las familias que conforman la comunidad, lo que comprende, entre otros aspectos, el conocimiento de algunos datos generales acerca de los niveles de escolaridad, nivel socio-económico, la composición del grupo familiar, las normas de convivencia, relaciones y actitudes hacia sus hijos e hijas en estas edades, su disposición a participar en este tipo de atención educativa.
· Diagnóstico del desarrollo de los niños y las niñas. Abarca las características del desarrollo, factores de interrelación intrafamiliar que pueden incidir en este proceso.
· Identificación de las embarazadas. En este sentido, se establecen las condiciones y desarrollo del embarazo (control, alimentación, higiene, otro) Establecimiento del índice de embarazo precoz que se presenta en la comunidad, entre otros aspectos.
· Caracterización de la comunidad. Es el conocimiento sobre los rasgos más importantes y significativos de la realidad histórica, cultural, demográfica, geográfica, educativa, de salud y salubridad, estructuras organizativas comunitarias, consejos comunales, la problemática de carácter social y convivencia que afectan al colectivo, así como, la valoración de las condiciones económicas y productivas, entre otras, a tomar en consideración por cuanto dan una visión integral de la comunidad en cuestión y constituyen elementos fundamentales para abordar el diseño y elaboración de un plan de acción, pertinente y viable.


Formulación del Plan de acción. El enfoque interinstitucional e intersectorial se fundamenta en los principios de interdependencia, coordinación, cooperación y corresponsabilidad, a partir éstos se establece la relación entre los objetivos, metas y planes de las diferentes instituciones, sectores u organizaciones que interactúan en el ámbito comunitario y se posibilita la ejecución de las Políticas y Programas Sociales del Estado. Es sobre ésta base que se diseña y elabora el Plan de Acción que viabiliza la ejecución de las acciones según los niveles de responsabilidad y competencias de los diversos actores involucrados, éste es el referente para la realización del trabajo, nacional, regional, municipal o comunitario en función de garantizar los derechos de los niños y niñas entre 0 a 6 años de edad y resolver problemas vinculados con la atención integral a la familia y la comunidad.

El diagnóstico participativo es el punto de partida para la formulación del Plan de Acción, suministra valiosa información que luego de su tabulación y análisis se transforma en el diagnóstico sistematizado a través de un informe el cual permite a todos los miembros del CAIPI, y demás involucrados, tener un conocimiento científico acerca de la realidad comunitaria, lo que conlleva al establecimiento de las prioridades y las estrategias para el trabajo conjunto.

El Plan de Acción debe especificar, los objetivos, las metas, actividades, lapsos de ejecución o cumplimiento, así como el compromiso de los responsables para llevar a cabo las tareas, de manera tal que permita hacer seguimiento, control y evaluación en cada etapa de su implementación.

En atención a estos criterios el Plan de Acción, tiene la siguiente estructura:

· Objetivos: Definen las metas o propósitos que deben alcanzarse.
· Tareas, acciones o actividades. Encaminadas a dar cumplimiento a los objetivos.
· Plazos de cumplimiento: enmarcar cada tarea en etapas que establecen lapsos para su realización.
· Participantes (instituciones, organismos o sectores): Prevé la participación de todos los integrantes de la estructura en las tareas o acciones propuestas.
· Responsables: Asigna a determinados miembros de la estructura la conducción y coordinación de las actividades previstas en el Plan.

Independientemente del momento o etapa en que se encuentre el desarrollo del Simoncito Comunitario, los objetivos deberán garantizar:

· El fortalecimiento de la estructura creada para su conducción.
· La elevación sistemática de la calidad de las acciones implementadas
· La sistematicidad de la formación
· La divulgación y reconocimiento permanente.
· El seguimiento, control y la evaluación.



Segunda Fase

Diseño de estrategias metodológicas para el desarrollo de la atención a las familias.
Un aspecto trascendente en la ejecución del Simoncito Comunitario, es el inicio de las acciones dirigidas a la atención pedagógica de la población infantil entre 0 y 6 años que no accede a los Centros de Educación Inicial o que no son atendidos por otros programas de atención integral.

En este punto, los miembros del CAIPI o los Consejos Comunales, otros actores educativos, el voluntariado y las familias, tienen un conocimiento claro y preciso sobre el significado, el contexto y el propósito de la actividad de atención pedagógica conjunta y quienes participan en ésta.

El diseño de las estrategias metodológicas para la ejecución de la atención pedagógica conjunta, implica un proceso previo orientado a:

ü Determinación de los grupos que serán atendidos, de acuerdo a la caracterización de familias de los niños y las niñas -según las edades de éstos- así como de las variantes de atención.

ü Establecimiento de los espacios comunitarios o lugares donde se congregarán los grupos de familias.

ü Selección y formación de los diferentes actores dispuestos a participar en el desarrollo de la atención educativa integral, en ambientes de familia y comunidad.

ü Determinación de las formas de atención.

ü Formación de las o los voluntarios simoncito.

ü Diseño de las acciones orientadas a la Atención Pedagógica Conjunta.

La Atención Pedagógica Conjunta, como una acción específica entre las competencias del docente de Educación Inicial, requiere del apoyo y el compromiso de otros actores, profesionales, jóvenes estudiantes (preferiblemente habitantes de la comunidad), madres que interactúan en la comunidad y que participarán como Voluntarias(os) Simoncito.

El conocimiento que se logre durante el proceso de selección, sobre la preparación y disposición de los que se aprestan a participar, permite decidir quienes se pueden desempeñar como formadores de los que orientarán a las familias y a los que puedan fungir como orientadores directos de estas.

La Selección de los Voluntarios(as) Simoncitos y de otros actores educativos. Se basa en el interés para en el trabajo comunitario, compromiso, responsabilidad, reconocimiento y prestigio social en la comunidad y su plena disposición para participar en la formación a la familia con niños y niñas entre 0 y 6 años.

Una vez captados y sensibilizados otros actores sociales, se planifica el proceso de formación para todos y todas.

La formación, se realiza fundamentalmente “in situ”, es decir, en lugares cercanos a donde residen o trabajan los que participan. El diseño de contenidos, procedimientos didácticos y formas de organización, estarán en correspondencia con los niveles de preparación que estos posean. En cualquier caso, se inicia con un diagnóstico que permite establecer las necesidades e intereses de formación de todos aquellos y aquellas que participarán en el desarrollo de la atención educativa no convencional de la Educación Inicial.

A partir de este conocimiento, se concebirán y planificarán las acciones de formación, las cuales tendrán inicialmente un carácter intensivo y, posteriormente, se desarrollarán de forma sistemática; sus períodos estarán en correspondencia con las necesidades y potencialidades de los grupos o personas en cuestión.

La formación estará dirigida a brindar conocimiento sobre: los objetivos y fines de la Educación Inicial, la importancia de la atención educativa oportuna, el desarrollo y aprendizajes de los niños y las niñas entre 0 y 6 años, sus intereses, necesidades, potencialidades, además de cómo, a través de la participación consciente de la familia, favorecer el proceso educativo de éstos.

A partir de éste conocimiento, se concibe y planifica el proceso de formación, que tendrá inicialmente un carácter intensivo y, posteriormente se desarrolla de forma sistemática, continua y progresiva. En este sentido, sus períodos están en correspondencia con las necesidades y potencialidades de los voluntarios y demás actores educativos.

La pertinencia y efectividad de la formación se evalúa sistemáticamente a partir del diseño, la planificación y calidad de las acciones ejecutadas por todas y todos los que en ella se involucran y participan. Se basa a los siguientes criterios:

· El carácter participativo, es decir, si los involucrados tienen posibilidades de opinar y valorar acerca de lo más importante del contenido que se desarrolló.
· Si considera las necesidades reales de los participantes.
· Si es activa, con el uso de métodos dinámicos y motivantes del conocimiento.
· Si se realiza en un ambiente agradable y promueva la participación, así como, la comunicación.
· Si puede ser objeto de un proceso seguimiento y evaluación, que permita saber sobre los nuevos conocimientos apropiados por los participantes.

Es importante brindar especial atención al proceso de formación en los momentos claves de la implementación del Simoncito Comunitario: a) cuando se inicia, b) cuando se generaliza o extiende a otros sectores o nuevas comunidades, c) cuando se hace el seguimiento para evaluar su calidad, d) cuando se prepara y realiza un corte evaluativo, para el cual deberán ser diseñados cuidadosamente los instrumentos a utilizar, su forma de aplicación, procesamiento y análisis final de la información obtenida..

Establecimiento de las formas de atención en función de:

Por lo que se determinan como formas de atención, las siguientes:

ü Atención a la embarazada y su familia, puede realizarse de forma individual o grupal, según las características y necesidades de la(s) embarazada(s); tomando en consideración los meses de gestación. Preferiblemente ésta atención debe ser orientada, realizada o supervisada por personal especializado (médicos obstetras, enfermeras o personal previamente formado).

ü Atención individual, en el hogar o en cualquier otro ambiente, participan la familia, el docente de Educación Inicial, Voluntaria(o) Simoncito u otro actor educativo, se brindará, en forma excepcional y en consideración de las necesidades y características de del niño o la niña.

ü Atención grupal: En grupos de 15 a 20 niños/niñas y sus familias, en diversos espacios de la comunidad, atendidos por un docente o un Voluntaria(o) Simoncito u otro actor educativo.

El trabajo comunitario implica, además de los aspectos intrínsecamente pedagógicos de la Educación Inicial, aborda otros estadios de la relación en el seno de los hogares, y entre los diferentes actores comunitarios, trata, también, de llevar a cabo procesos dinámicos de formación sobre otros temas, asimismo esenciales para la convivencia en comunidad, es decir, los valores, la paz, la libertad, la solidaridad, la cultura, la cooperación, la democracia, la independencia, la soberanía, la integridad territorial, el bien común, entre otros.

De allí, que las acciones formativas, tanto del docente como de las o los Voluntarios Simoncito, deben contemplar la inclusión de temáticas que permitan el desarrollo de los aspectos antes indicados, cuestión que se debe planificar y realizar en el marco de los proceso de formación de los miembros del CAIPI o Consejos Comunales, de las(os) Voluntarias(os) y de la actividad de la Atención Pedagógica Conjunta

La Atención Pedagógica Conjunta, (APC)

La orientación a las familias, tanto de forma individual como grupal, se ejecuta a través de la actividad de Atención Pedagógica Conjunta, que comprende la participación de éstas -madre, padre, abuelas(os), tías(os), hermanas(os) mayores, representantes o responsables- en conjunto con los niños y las niñas, del docente de educación inicial, Voluntaria(o) Simoncito u otro actor educativo, previamente formado.


La Atención Pedagógica Conjunta, requiere de un proceso de Planificación de las actividades a realizar, lo que implica:

I. Partir de los resultados obtenidos de la caracterización de la familia, niños y niñas y comunidad, tanto la inicial como la que se deriva del contacto cotidiano en la interrelación con las familias. Selección de los diferentes contenidos, conforme al currículo de Educación Inicial y de su respectiva contextualización, considerando para ello los ejes integradores, pilares y los aprendizajes a ser alcanzados de acuerdo a las edades de los niños y las niñas, el contexto educativo, el entorno familiar y comunitario. Este momento es propicio para planificar, también, el tema del mensaje formativo a las familias.

II. La Atención Pedagógica Conjunta, en su concepción debe estimar el juego como una estrategia fundamental pues posibilita el establecimiento de interacciones afectivas, abiertas y naturales, por lo que deben proponerse actividades lúdicas atractivas que motiven y alegren a familias, niños y niñas. Lo que se logrará a partir del análisis con las familias sobre la importancia de su participación entusiasta y alegre en las diferentes actividades que se realizarán.

III. Prever la participación de las familias en los distintos momentos de la Atención Pedagógica Conjunta, lo que significa determinar que harán los niños y las niñas, y con quién lo harán, antes de iniciar las actividades propiamente dichas.

IV. Selección y elaboración de los materiales y recursos didácticos necesarios y de los momentos en que van a ser utilizados.

V. Determinación del espacio donde se realizará la actividad de la Atención Pedagógica Conjunta, teniendo en cuenta las condiciones, higiénico-sanitarias y el aprovechamiento del área de trabajo.

VI. Ubicación y selección de otras personas que puedan participar en el desarrollo de la actividad o en una parte de ella

La actividad de la Atención Pedagógica Conjunta, ya sea de forma individual o grupal, se estructura en tres momentos:

PRIMER MOMENTO DE LA APC.- Preparación y orientaciones.

1.i) Creación de las condiciones necesarias, para realizar la actividad.

o Conversación con las familias, sobre las acciones realizadas en el hogar: ¿Qué hicieron?, ¿Cómo lo hicieron?, ¿Qué lograron?, ¿Cómo utilizaron los recursos o materiales? ¿Qué idearon? ¿Qué dudas tienen?

o Autorreflexión e intercambio sobre las competencias y habilidades que tienen las familias para educar a sus hijos e hijas, así como, las debilidades que aún presentan.

o Valoración acerca del desarrollo que van alcanzando sus niños y niñas: logros obtenidos.

o Dificultades, que a juicio de la familia, aún presentan sus niños y niñas.

o Intercambio para evaluar sobre la participación de otros miembros de la familia en el proceso de aprendizaje y desarrollo del niño o la niña, en el hogar.

1. II) Orientación a las familias sobre qué van a hacer, cómo hacerlo y para qué?

o Socializar y consensuar con las familias, los objetivos y propósitos de las actividades a realizar con sus hijos e hijas.

o Exploración acerca de lo que conocen sobre la actividad a desarrollar y orientación de cómo realizarla a partir de sus propios saberes y experiencias.

o Acuerdo de las acciones que realizarán y cómo la harán para potenciar el desarrollo y aprendizaje del niño y la niña, brindando apoyo en aquellos casos en que sea necesario. En este momento es importante, y si es necesario, el modelaje del docente, o voluntaria(o) simoncito.

o Propuesta para que algunas familias modelen ante otras lo que van hacer y cómo hacerlo.

o Sugerencias de cómo, -cada familia- puede apreciar y evaluar si alcanza o no lo que se propone a través de su participación en el proceso educativo de su hijo o hija y la importancia de ésta.

1. III) Utilización de materiales didácticos.

o Valoración, por parte de las familias, el docente o voluntario simoncito, de que la selección de los recursos o materiales didácticos se ajustan a los requerimientos para la realización de las actividades planificadas en función de la Atención Pedagógica Conjunta.

o Comprobación de la comprensión por parte de las familias acerca de qué y de cómo potenciar el aprendizaje y desarrollo de sus niños y niñas, a través del uso de los recursos y materiales existentes en el hogar y en su entorno.

o Invitación a las familias a aportar sugerencias para utilizar de forma creativa los recursos y materiales didácticos en las diferentes actividades.






SEGUNDO MOMENTO DE LA APC.- Desarrollo de la actividad.-

2.I) Creación de un clima favorable para la realización de la actividad.

o Invitación a las familias, junto con sus niños y niñas, a utilizar los recursos o materiales didácticos elaborados, brindando las orientaciones correspondientes y estimulando el interés por la actividad lúdica a realizar.

o Dar sugerencias para la selección de los recursos lúdicos y/o materiales didácticos necesarios, de acuerdo al propósito pedagógico en la planificación del docente, voluntaria(o) o de otro actor educativo.

2. II) Participación de las familias, niños y niñas en la actividad.

o Motivación para la participación activa y conjunta de las familias, de los niños y niñas, en la actividad, mediante preguntas y sugerencias pertinentes.

o Estimulación de la creatividad e iniciativas que generen el surgimiento de propuestas, procedimientos, dinámicas y estrategias, para el logro de los objetivos mediante actividades lúdicas y el uso de recursos materiales.

o Observación del desempeño de las familias y otros actores educativos de la comunidad, con la finalidad de valorar sus potencialidades como posibles Voluntarias(os) Simoncito.

2. III) Atención a las diferencias individuales.

o Atención al desempeño de acciones individuales y de conjunto entre familias, niños y niñas.

o Ofrecimiento de diferentes tipos de apoyo a las familias que lo requieran.

o Sugerencias que permitan, a las familias, brindar diferentes tipos de apoyo a sus hijos e hijas que lo necesiten.

o Orientación a las familias para que evalúen lo realizado por sus niñas y niños.

2. IV) Promoción de las relaciones entre familias y niñas niños.

o Estimulación del establecimiento de comunicación efectiva y las relaciones entre las familias y de estas con sus niños y niñas.

o Promoción del respeto, solidaridad, cooperación y la convivencia entre las familias.




TERCER MOMENTO DE LA APC.- Evaluación y proyección.

3.I) Valoración de los resultados en función de los objetivos de la actividad de Atención Pedagógica Conjunta.

o Evaluación por la familia, el docente, la (el) voluntaria(o) simoncito o actor educativo, de los resultados de la actividad realizada; alcance y el nivel de cumplimiento de los objetivos propuestos.

o Análisis de los logros alcanzados como grupo y cada niño y niña en particular.

o Reflexión acerca de cómo se ve cada familia en su rol de educador y apreciación de la ayuda que necesita.

3.II) Orientación a la familia sobre la continuidad de las acciones educativas en el hogar.

o Motivación a las familias para que sugieran, qué otras acciones pueden realizar en el hogar, a partir de la actividad cumplida, así cómo la forma de involucrar a otros miembros de la familia en su realización.

o Orientación acerca del uso de los materiales impresos y la elaboración de materiales lúdicos y otros recursos para desarrollar las actividades educativas en el hogar y en los próximos encuentros.

o Orientar a las familias sobre cómo evaluar y registrar los logros alcanzados por sus hijos e hijas.

3.III) Sugerencias de actividades a realizar en el hogar, a fin de prepararse para la próxima actividad de Atención Pedagógica Conjunta.

o Reflexión sobre temas de interés a debatir o analizar por el grupo en próximos encuentros.

o Propuestas de posibles personas del grupo o de la comunidad que pudieran impartir temas o preparar y conducir alguna actividad.

o Sensibilizar a las familias para que divulguen el Simoncito Comunitario entre otras familias de la comunidad y se comprometan a asistir a las próximas actividades.

3. IV) Mensaje formativo e informativo a las familias.

o Orientación a las familias, por parte del docente, voluntaria(o) u otro actor educativo, sobre temas de interés para: el grupo en cuestión, la comunidad, o sobre una situación especial que pueda ser desarrollada en términos generales y que permita alertar sobre un hecho que afecte a una familia en particular o a la comunidad.

o Temas de carácter general o particular, como por ejemplo, sobre los derechos de los niños y las niñas, el aprendizaje, el desarrollo, el afecto, el ambiente, el juego, la salud, la higiene, los valores, la ética, etcétera. y que coadyuven a la formación y empoderamiento real de la propuesta socialista que impulsa la revolución bolivariana con el propósito de ir transformando la realidad.

Tercera Fase.- Seguimiento y Evaluación.

El seguimiento y la evaluación forman parte del proceso de implementación del Simoncito Comunitario, desde su inicio y durante el desarrollo del mismo. Está dirigida a la valoración de la efectividad y calidad de la Atención Educativa No Convencional, así como de los niveles de participación y compromiso de los diferentes actores involucrados, con el propósito fundamental de conocer, de manera científica, los resultados que se alcanzan y si estos se corresponden o no con los fines y propósitos previstos en la Educación Inicial.

El seguimiento implica un conjunto de acciones sistemáticas y permanentes de formación, acompañamiento, asistencia y asesoramiento técnico, así como del control social en cuanto a la participación de los diferentes actores involucrados en ésta vía de atención integral. Es un proceso que se realiza y proyecta desde el mismo momento del inicio de la implementación del Simoncito Comunitario y que en la medida que se desarrollan las acciones se profundiza y se hace más integral y complejo.

La estrategia general de seguimiento y evaluación en esta vía de atención educativa, abarca a todos los participantes - Docentes, Miembros del CAIPI, Voluntarias(os) Simoncito y Familia- quienes serán responsables de su realización e incluye:

a) Aspectos estadísticos sobre número: de familias, embarazadas, población niños y niñas.

b) Los niños y las niñas sus edades, su nivel de desarrollo progresivo y su aprendizaje adquirido.

c) Las familias, y a otros actores educativos, nivel de preparación, compromiso y responsabilidad.

d) Los Responsables, de conducir la AENC y aplicar las diversas formas de atención, su formación, desempeño y dominio.

e) Nivel de formación, compromiso, coordinación, coherencia y cohesión entre los miembros del Consejo de Atención Integral a la Primera Infancia (CAIPI) en las diferentes instancias.

f) La comunidad, el impacto que ha producido la implementación del Simoncito Comunitario.

El seguimiento tiene también como objetivo la obtención de información en forma sistemática, progresiva, permanente y en determinados periodos de tiempo, lo que además de posibilitar las evaluaciones parciales de la implementación del Simoncito Comunitario, permite asimismo la elaboración de planes de formación, en atención a las necesidades detectadas así como a los procesos de asistencia y asesorìa técnica.

Las formas organizativas para la realización del seguimiento son:

· Visitas de asesoramiento.
· Acompañamiento Metodológico Conjunto.
· Talleres.
· Encuentros o Jornadas de Formación Pedagógica.
· Informes.
· Entrevistas.
· Estudio de aprendizajes significativos
· Visita al hogar.

La estrategia general de seguimiento y evaluación permea todo el proceso e implica:

· Diagnóstico inicial del desarrollo de todos los niños y las niñas que participan, de sus condiciones de vida en el hogar, del nivel de preparación que presentan las familias y de las características de la comunidad.

· Seguimiento de algunos indicadores del aprendizaje y desarrollo del niño o la niña en correspondencia con su edad, así como otros indicadores de la preparación que alcanza la familia y otros agentes de la comunidad, su disposición a involucrarse en el proceso.

· Corte evaluativo parcial (de carácter transversal) para valorar el nivel de aprendizaje y desarrollo alcanzado por los niños y las niñas, el nivel de preparación psicológica y pedagógica alcanzado por las familias, el conocimiento que estas van alcanzando y el apoyo y participación de otros factores de la comunidad.

· Indicadores de desempeño de los docentes y de los otros agentes educativos que participan, y de las formas y niveles de coordinación, coherencia y cohesión de los CAIPI en las diferentes instancias


Soportes bibliográficos y materiales audiovisuales.

La mediación de la familia en el proceso educativo de sus hijas e hijos, se apoya en la elaboración y uso de diversos recursos materiales lúdicos y audiovisuales, así como, el manejo de un conjunto de cuadernos y fascículos sobre el aprendizaje y desarrollo infantil, diseñados y elaborados con la finalidad de que haya continuidad, en el hogar, de la acción formativa iniciada durante la realización de la actividad de atención pedagógica conjunta. A estos se agregan otros recursos bibliográficos y documentos fundamentales, entre los cuales se señalan:

ü Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. (CRBV)
ü Ley Orgánica de Protección al Niño y al Adolescente (LOPNA)
ü Currículo de Educación Inicial.
ü Materiales para la formación de los docentes de Educación Inicial, así como, para otros encargados de orientar a las familias y a las comunidades.
ü Materiales impresos sobre desarrollo del niño y la niña entre 0 y 6 años de edad, para uso de las familias.
ü Registro para el seguimiento de la aplicación de la AENC.
ü Materiales de apoyo, desde el punto de vista metodológico, dirigido a los docentes de Educación Inicial y a los otros actores educativos.
ü Ley de los Consejos Comunales.
ü Micros radiales, audiovisuales

El Reconocimiento Social.

Se concibe desde el inicio y se dá durante todo proceso de implementación y desarrollo del Simoncito Comunitario y tiene como propósito esencial retribuir desde el punto de vista social a todos los que participan (familias, voluntarias(os), instituciones, organizaciones comunitarias, lideres) en virtud de la dedicación, responsabilidad y cumplimiento de los compromisos adquiridos. Por tanto, comprende la determinación de a quiénes se va a reconocer, los momentos para realizarlo y las vías que se utilizarán.

Organización del proceso pedagógico en la atención no convencional.

La ejecución de le Atención Educativa no Convencional. Simoncito Comunitario, desde los centros de educación inicial, esta íntimamente vinculada a la información que se obtenga a través de la aplicación censo comunitario. Este proceso permitirá conocer la situación en relación al numero de niños y niñas de la comunidad, que no podrán ser atendidos en el centro, debido a las limitaciones de espacio físico, el número de madres embarazadas, el número de familias con niños/as menores de seis años de edad, etc. El procesamiento de dicha información, constituye el insumo fundamental para la formulación del plan de trabajo para la atención de esta población.

El plan de trabajo deberá contener los objetivos, acciones y actividades de orden pedagógico, que se llevarán a cabo para la atención de los niños(as), la orientación y formación de las familias, las estrategias organizativas, de comunicación y promoción en la comunidad, la ubicación de los espacios de familia y comunidad donde serán ejecutadas, la asignación de docentes Educación Inicial, horarios de atención de acuerdo a la distribución por grupos de niños y familias y sectores de la localidad.

El plan de trabajo para la organización y ejecución de la Atención educativa no convencional, es un componente esencial del proceso de formulación de Proyecto Educativo Integral Comunitario.


La Rutina diaria en la Atención Educativa No Convencional Simoncito Comunitario, en la Actividad Pedagógica Conjunta.

La rutina diaria en la atención educativa no convencional Simoncito Comunitario, amerita como aspecto fundamental, la organización de las madres y sus hijos/as por grupos de trabajo, en horarios concensuados y espacios predeterminados.

La rutina diaria en la atención no convencional estará conformada por los siguientes momentos:
Bienvenida y recibimiento a las madres y a los/as niños (as).
Actividad de integración grupal y actividades lúdicas con los niños y niñas.
Orientación sobre los contenidos y actividades pedagógicas previstas durante la jornada. En este momento el/la docente explica a las madres asistentes, los aspectos a ser trabajados, su importancia, el Qué. Porqué y para qué de la actividad y su correspondencia dentro de una o varias áreas de aprendizaje y aprendizajes a ser alcanzados en los niños y niñas.
Modelaje y demostración por parte del docente.
Aplicación por parte de las madres y observación mediación del docente.
Intercambio y recuento de las actividades y experiencias realizadas.
Evaluación y seguimiento de las actividades.
Cierre.














Año 2008: Profundización del Sistema Educativo Bolivariano